Gullón concluye un programa de búsqueda de nuevos ingredientes para lograr alimentos más saludables
En el proyecto, liderado por la galletera, han participado siete centros de investigación y catorce empresas agroalimentarias
Catorce empresas agroalimentarias y siete centros de investigación concluyeron el proyecto de Higea, liderado por Galletas Gullón, y centrado durante cuatro años en la búsqueda de nuevos ingredientes para reducir la obesidad, la diabetes y los problemas cardiovasculares a través de la alimentación. Durante este periodo, el proyecto, denominado Higea, «ha permitido generar el conocimiento necesario para la obtención de ingredientes y matrices alimentarias que ayuden a reducir la obesidad, la diabetes y los problemas cardiovasculares a través de la alimentación», informó ayer la galletera palentina.
Se trata de nuevos ingredientes que se incorporaran a la fabricación de alimentos más saludables, además de las tecnologías necesarias para su fabricación. Además se ha validado y verificado científicamente mediante ensayos clínicos que estos alimentos contribuyen a la reducción del riesgo de enfermedades. El proyecto Higea surgió para dar respuesta a los nuevos hábitos alimentarios de la sociedad actual que reclama productos más saludables que ayuden a disminuir el riesgo de padecer enfermedades como la obesidad, la diabetes y los trastornos cardiovasculares.
Por eso en 2007 se puso en marcha el proyecto Higea (Herramientas para Investigar y Generar nuevas metodologías y tecnologías para la prevención de Enfermedades crónicas Alimentarias), que ha invertido 24 millones de euros en los últimos cuatro años.
Para hacer frente a esta realidad, se creó un consorcio multidisciplinar integrado por diversas empresas alimentarias, empresas fabricantes de ingredientes, empresas de base tecnológica y grupos de investigación especializados, que han permito abordar con éxito el proyecto en todas sus fases. Entre las 14 empresas que constituyen el consorcio hay fabricantes de galletas, de harinas, de mermeladas, de concentrados omega-3, de ‘snaks’, chocolates, embutidos, pescados y mariscos, frutas, vinos, productos lácteos y aceites.
Además han colaborado siete organismos de investigación tales como Cartif, Ainia, Azti Tecnalia, CNTA, la Universidad Autónoma de Madrid, la Universidad San Pablo CEU y la Universidad de Zaragoza, todos con una acreditada experiencia en la colaboración con empresas del sector agroalimentario y en la transferencia de tecnología.
Fuente: elnortedecastilla.es